Zurück zur Übersicht

Apnea del sueño – Un compañero astuto

Aunque el nombre de la enfermedad suena muy serio, los síntomas a menudo se ignoran y se asocian con problemas completamente diferentes. La apnea del sueño es una mezcla de síntomas que ocurren durante el día y la noche, como la sensación constante de agotamiento, dolores de cabeza matutinos, lagunas de memoria, confusión y ronquidos. Estudios recientes han demostrado que la apnea del sueño no tratada puede conducir a consecuencias graves para la salud y la vida. ¿Cuáles son las causas de los problemas respiratorios durante el sueño? ¿Cómo se maneja para evitar daños a la salud?

Obesidad mortal
El síndrome de apnea del sueño o SAS se define como episodios repetidos de bloqueo de la vía aérea superior durante el sueño, que conducen a apnea y respiración superficial. Su aparición aumenta con problemas constantes de obesidad en la población, que es uno de los principales factores de riesgo para esta enfermedad. Aproximadamente el 80 por ciento de las personas obesas sufren SAS al mismo tiempo; el 70 por ciento de ellos con una forma más aguda de la enfermedad. No es de extrañar que la incapacitante apnea del sueño afecte hasta a 18 millones de adultos estadounidenses, entre los cuales la obesidad es un problema común. La acumulación de grasa corporal excesiva alrededor del cuello afecta especialmente el desarrollo de la enfermedad. Esto no es una coincidencia. Los músculos que controlan las vías respiratorias superiores se relajan durante el sueño. La disminución de la actividad muscular causa un paladar blando y la caída de la lengua, lo que a su vez conduce a un estrechamiento de las vías respiratorias. Algunas personas comienzan a roncar en ese momento. Los problemas respiratorios ocurren con un estrechamiento excesivo de las vías respiratorias, cuya obstrucción completa conduce a una breve pausa respiratoria llamada síndrome de apnea del sueño. En la práctica, se genera una sensación de asfixia, seguida de despertar y recuperación de la respiración. Las personas que padecen esta enfermedad generalmente no recuerdan las fases de apnea. Estas interrupciones respiratorias duran algunos segundos y pueden ocurrir varias cientos de veces durante una noche. Es evidente que tales situaciones tienen consecuencias catastróficas para el cerebro y todo el cuerpo.

Diagnóstico y tratamiento
El síntoma más común que reportan los pacientes con trastornos respiratorios nocturnos es la somnolencia aumentada durante el día. En su forma leve, el SAS se manifiesta en actividades cotidianas, como ver televisión o leer. En casos extremos, los pacientes con una forma grave de la enfermedad se duermen mientras comen, hablan, trabajan o incluso conducen. También hay informes sobre la relación entre los trastornos respiratorios nocturnos y la aparición frecuente de depresiones y reducción de la libido. Afortunadamente, existen diversas estrategias para tratar el síndrome de apnea del sueño, especialmente en casos no críticos, así como para implementar medidas preventivas. La reducción del peso corporal y mantener un IMC saludable son recomendaciones habituales. Los pacientes con SAS también deben seguir una higiene del sueño adecuada. Debido al efecto de la gravedad, se recomienda dormir de lado, ya que la apnea ocurre con mucha más frecuencia en posición supina. Para lograr un confort adecuado al dormir, vale la pena usar mantas sensoriales. Gracias a su relleno más pesado (sin plumas), tienen un efecto calmante y anti-estrés. También pueden mejorar las funciones de los sistemas respiratorios. No se recomienda el alcohol antes de dormir, ya que reduce la actividad del nervio hipogloso y aumenta la aparición y duración de las apneas. Las medidas preventivas también incluyen dejar de fumar. La terapia típica para la apnea del sueño implica la producción de una presión positiva constante en las vías respiratorias mediante el uso de un aparato especial (CPAP).

El síndrome de apnea del sueño es una enfermedad que se desarrolla gradualmente y, debido a una gran variedad de síntomas, a menudo se subestima y no se toma en serio sin un diagnóstico exacto. Recordemos que el reconocimiento temprano del síndrome de apnea del sueño y la introducción inmediata de una terapia pueden evitar complicaciones y el deterioro de la calidad de vida diaria.

Dejar un comentario

Todos los comentarios son moderados antes de ser publicados